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Brujas o hechiceras

Las citas en la ciudad son tan primordiales como cepillarse, tan necesarias como respirar, pues es toda un arte que todos debemos aprender para poder conseguir un romance decente y digno para nosotros. Y es que la creencia de querer a alguien igual o mejor que nosotros es un disco duro de nuestro día a día que andamos como radar buscando oro dentro de una casa de cartón como locos viendo en todos lados a ver donde suena. Pero hay personas que se la toman muy en serio, tan en serio que solo buscan lo mejor, entre uno de ellos esta mi amigo Ángel Solar, un manager de modelos que solo sale es con mujeres de ese estilo y es tanto que es su sello de las citas, así que cuando se entero que Cristina una de mis amigas era modelo para pagarse sus estudios no dudo en rogarme para salir con ella, el problema es que cuando pensé que había hecho mis labores de Cupido bien, la pobre Cristina en la cena me reclamo y se quejo por haberle presentado alguien tan superficial. _nunca pensé que quisiera salir corriendo de una cita, me sentía como si estuviera con mi mama que me bajaba la autoestima cuando aumentaba kilos. Mary se ríe mientras come su comida rápida _ ¿te dijo gorda? Alejandro ahogándose _pero si tu estas perfecta, vaya de idiota. Diego riéndose de lo que sucedía _es que Ángel es así, solo sale con talla ceros, es como ser racista pero nunca pensé que contigo pensaría así. Cristina traumada y casi sin apetito _pues fue así, me dijo modelo gorda, y que simplemente me llamaría por si tenía un trabajo pero para mas nada. Después de escuchar la historia de Cristina, quise investigar el caso, ¿Por qué ya cuando tenemos nuestros estándar tan alto, no se puede bajar un poco?

Brujas o hechiceras

Para muchos de nuestro genero masculino hay solo dos tipos de mujeres que vemos a primera vista, las brujas que son aquellas que solo y únicamente sirven para ser amistad y por mas buena persona que sea, solo vemos lo horribles que son físicamente… y las hechiceras que nos dejan bobos mirándole el cuerpo y sin importarnos para nada su personalidad o temores. He allí el problema estamos encasillados y no vemos mas que eso, claro que esto es aplicable a las mujeres también… pues el cerebro humano le encanta ser extremista y no ver los puntos intermedios que pueden ser realmente nuestra especialidad he incluso la fuente de nuestra felicidad.

La otra cara de la moneda

Después de saber los estándares de la ciudad, le pedí una entrevista a Rachel Ramírez una modelo, juvenil y muy hermosa que estaba comenzando poco a poco a escalar en el mundo de la moda, tomamos unos cocteles y luego de ello fuimos a una disco donde aunque empezamos a bailar, ella se volvió muy alocada tanto que no se cundo paso de liberal a libertina todo el bar la veía y yo no estaba acostumbrado a tanta atención, así que en lo que vi a Ángel lo llame a la mesa con nosotros y en lo que pude me escabullí de allí, tome un taxi mientras salía del club me daba cuenta de que los estándares de citas en la ciudad son incalculables, el buscar a la fulana media naranja es mas difícil de lo que pensé, y precisamente no casi siempre es lo opuesto a ti … por un lado están los que buscan hechiceras sexys o príncipes azules que se malgastan con el tiempo y pierden su brillo pero cuando estos dos se consiguen se reconocen instantáneamente, mientras están los que por nada del mundo quieren quedarse atrás y hacen lo que sea para llamar la atención, o simplemente en silencio guardan sus ideales para no ser rechazados… si, la ciudad es una caja de sospesas en cuanto a citas de gustos de amor, pero lo que siempre van a estar son los amigos con los que puedes salir corriendo y quejarte de una mala noche.