sábado, 10 de julio de 2010

Juventud al extremo

No es que envejezcamos espiritualmente, no es que dejemos de sentirnos como niños, pero llega un momento en nuestras vidas, que nos damos cuenta que ya no tenemos los mismos intereses de cuando teníamos quince y realmente ni nos interesa volver a pasar por las pesadillas de las espinillas, complejos ni malestares de esa época… pero hay que reconocer que una de las partes mas felices he importantes de todos fue esta y hacemos muchas veces lo que sea para volver a vivir este pedazo de pasado.

La ciudad nos da la oportunidad de revivir este pasado y no con una maquina del tiempo en un centro comercial, si no con la juventud que nos rodea llenos de hormonas y de rebeldía… Diego estaba desayunando con su amigo Alejandro una mañana cuando encontraron a unas chicas del liceo, ellas se les acercaron he invitándolos a unas fiestas ellos accedieron a invitarlas a un café… ellas se veían maduras y decididas, así que por no llevarse muchos accedieron completamente a ir al evento. Mientras Diego murmuraba a Alejandro al ver que ellas se acercaban a la puerta _son adolescentes.

_nosotros tampoco es que somos ancianos, ellas tienen 16 y nosotros 20 ¿cual es el problema?

_si bueno, pero después de salir con una divorciada y ahora con una niña es confuso para mi. Alejandro sonriéndoles a lo lejos _pues relájate y disfruta de la ciudad, así tomamos gratis. Mary y Cristina se acercan al restaurante donde desayunan los chicos y después de saludarlos les muestra unas entradas _oigan unas chicas nos invitaron a esta fiesta de graduación, bueno en realidad las compramos es que tenemos tanto tiempo que no vamos a una. Dice Mary mientras Cristina pide su desayuno _pues si a veces hay que revivir ¿no? Diego riéndose _pues parece que iremos los cuatro unas chicas acaban de invitarnos.

Cristina sorprendida _salen con niñas, ¡por dios! Alejandro viéndola a los ojos _no te pongas celosa mi amor, solo es diversión. Cristina viéndolo con rabia _vete al diablo, ya los veré queriendo jugando a ser niños.

La fiesta del botox

Diego y Alejandro al entrar a la fiesta fueron abordados por las chicas, Marissa la que estaba con Alejandro con su cabellera abundante y vestida casi desvestida lo llevo a un lugar oscuro y con apenas saber su nombre empezó a besarlo, los padres de ella al verla con Alejandro no aguantaron la rabia y con un arma empezaron a seguir a mi amigo que ya tenia los pantalones abajo.

Diego sin saber lo que sucedía se fue a bailar y a hablar con Natasha era una chica muy especial, sonriente y hermosa… el pensó que la juventud no seria problema hasta que se acerco a besarla y en ese momento le susurra _eres idéntico a mi papa. El arruga su cara en forma de incomodidad

-¿que? ¿Estas loca? _es cierto, me recuerdas mucho a el. El se aleja y aun sin comprender le dice _ tengo que buscar a Alejandro, me tengo que ir gracias por la invitación.

Diego salió corriendo mas rápido que Alejandro y es que como no… si eso que le dijeron trauma a cualquiera, lo bueno de las ciudades es que puedes salir de las fiestas concurridas sin ser visto, todo el mundo después de media hora se ocupa de seducir, embriagarse y sonreírle hasta los enemigos sin fijarse quien camina hacia la salida.

Diego al ver que Alejandro estaba semidesnudo le dio la chaqueta que llevaba, y con la ayuda de Cristina y Mary que iban saliendo de la verbena lograron tomar un taxi sin pensar que eran un grupo de exhibicionistas.

Diego _ ¿y que paso Mary, porque se vinieron con nosotros?

_por que estaba cansada. Cristina tomando lo que quedo de su copa _que por cansada Mary es que estaban puros niños, yo se que eso es bueno para sentirse joven, pero ya estaba harta de hablar tantas babosadas.

Alejandro riéndose de las chicas _ vaya tremendo paseo ¿no? Con razón también salieron corriendo

Mary golpeándolo _pero por lo menos no terminamos sin pantalones ni camisa como tu, por acostarte con una pre-promiscua. Alejandro cubriéndose con la chaqueta _si pero por lo menos no necesite hablar tonterías.

Diego pidiéndole al taxi que se detenga _bueno ya dejen de pelear ya llegamos al apartamento, así todos podemos descansar y tu vestir ya se ha visto mucho de ti hoy… es suficiente. Terminemos de pasar la noche en la azotea tomamos un poco de vodka que tenemos y olvidemos la noche…

Mary bajándose del auto –si, por favor, los niños los dejo para cuando sea una cougar…

George y Demmi desde jóvenes

Los chicos se quedaron viendo la metrópolis desde la azotea, y disfrutando privadamente otra noche fría del lugar. Cuando me contaron no deje de reírme y darme cuenta que el botox natural- dígase de andar con jóvenes para vernos mas jóvenes… es mas difícil de mantener, hablar y hasta soportar que el de las ponzoñas de cobra, sangre y veneno que usan las mujeres presumidas de la alta sociedad. Lo bueno es que la experiencia se adquiere poco a poco y al llegar cuando en realidad sea necesario usar esta formula seremos unos expertos George Clonney o Demmi Moore.

No hay comentarios: